Piratas que navegan y se cuelgan en cada puerto de una de estas con el pelo largo y la falta corta.
Y aunque las sirenas acaban con el rimel corrido, el corazón roto y echando de menos algo que nunca ha sido suyo, ahora es este pirata el que va de independiente queriendo romper corazones (y eso lo sigue haciendo).
Pero que va, este pirata no es independiente. Busca en cada puerto alguien diferente que le llene, creando falsas esperanzas y enamorando, aunque esté comprometido ya con la sirena del puerto de atrás.
Y es porque tiene miedo: miedo de que esta sirena encuentre alguien mejor que él, aún sabiendo que él jamás podrá encontrar alguien mejor que ella y a pesar de eso prefiere una en cada puerto, además de esta.
Y así no se navega, pirata. Así no.
©Alejandra
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''que yo soy un pirata que guardo el corazon en alta mar, lejos de los cantos de sirenas, lejos de todos''
ResponderEliminarMe encanta(:
Saludos de la chica de los chicles, que espera no acabar con las piernas atadas esperando a su pirata
http://lachica-deloschicles.blogspot.com.es/
muchisimas gracias chica de los chicles:)
ResponderEliminarAunque hay piratas muy sirenas, y sirenas muy piratas
me paso por tu blog,
un besín