martes, 23 de agosto de 2011

#4. Secretos.

La historia de juntar sus Adidas y las Converse de ella en la misma habitación se repetía cada sábado por la mañana. Al principio ella solo le ayudaba con Química, al principio.
Todo empezó el domingo antes de el examen global, y mientras ella le explicaba la primera energía de ionización, y él solo sabía pensar en ella. En cómo cogía el lápiz, en la letra tan bonita que tenía, en los brazos tan esbeltos y sus piernas (delgadas y morenas) cruzadas debajo de la mesa. Y en su sonrisa, claro, que no se iba aunque se equivocara, así como el lunar que tenía en su hombro derecho.
No podía concentrarse, así que de un momento a otro él se paró y le dijo:
- No me he enterado de nada, lo siento- Y sonrió, tímidamente.
+ Bueno, estate atento porque solo lo voy a repetir una vez más, ¿Vale?- Y fue ahí , justo ahí, cuando cometió el segundo mayor error. El primero fue aceptar darle clases a él. El segundo mirarle directamente a los ojos cuando eran conscientes de la atracción.
Y sus labios, encajaron como una pieza de puzzle en los suyos. Sus manos, traviesas, soltaron el lápiz y le cogieron del cuello. Y él, feliz, se le olvidó que el valor de la constante de equilibrio Kc, solo se ve afectado por un cambio en la temperatura, bueno y también cómo resolver el problema número 29 aunque lo habían repetido mil veces.
No querían compromisos, les aterraba la idea de quererse, de amarrarse. Pero se quisieron. Solo por una tarde, aunque les gustaba que fuera así.
Así que aunque apareció como profesora de Química, la química hizo de las suyas. Y tras varias conversaciones acordaron que no podía darles más clases, o sería peor para lo dos.
Solo quedó en eso, en tres meses dando clases de Química, y en una tarde, la tarde antes de examen global, donde todo empezó y acabó a la vez.
Dos meses después de esa tarde ella recibió una llamada, y esa noche quedaron para celebrar algo.
Ella se enamoró de él,
él aprobó química.

©Alejandra
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5 comentarios:

  1. Ella se enamoró de él,
    él aprobó química...
    ¡Me gustaaa!

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  2. yo no doy química, pero también me vale, ¿no?

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  3. Mil gracias a las dos! ♥
    Jajaja y claro que te vale!

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  4. Alejandra, increible como escribes, parece que cuando acabo de leerlo, he estado dentro de la historia :)

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  5. Muchísimas gracias Anna!!
    De verdad, me encanta que os guste :)

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